Felicidad sostenida que no me lleva a nada, quieres darme amor, el que a mí me falta.
Yo firmé mi sentencia de muerte en este alma que hoy se desliza inerte por cada lágrima que derramo en mis últimos minutos de vida, desafiando al resultado.
Mi alma hay a muerto, mi corazón nunca más quedará despierto, ahora vaga por los instantes eternos. 


Me odio a mí misma, por no poder transmitirte el dolor y la nostalgia, necesito que entiendas lo mucho que te sigo echando en falta.
Me refugio en el recuerdo de un pasado feliz, momento en el que tenía los suficientes motivos para sonreir, 
ahora no le encuentro sentido a esta vida que me hace querer morir a cada instante, para encontrar la paz aún reclusa en la eternidad.

Hoy es un día gris para mi alma, me cuenta con nostagia como recordaba tu reflejo frente a mi ventana, hoy se siente triste y abandonada, hoy.. Ya no sabe sonreir con nada.

Es sólo una noche más.. Y nada más.
Ahora lo que siento es sólo un secreto a voces en silencio. Sé que no debo pero siempre acabo sacando lo que llevo dentro. Si tan sólo me dijeras que me quieres como antes.. Yo desisto del resto del mundo y visito
tu ventana cada noche, necesito un último abrazo.